FSC-CCOO Navarra | 23 noviembre 2024.

Ante la violencia machista... salvar vidas es lo primero

  • Existen cuestiones mejorables en este periodo que nos está tocando vivir, pero no todas dependen de otras personas. También hay situaciones en las que desde nuestras casas podemos ayudar.

12/04/2020.

Si hace unos días hablamos de la necesidad de intensificar la ayuda a las mujeres víctimas de malos tratos por parte de las administraciones públicas, hoy recordamos la importancia que en este confinamiento tiene el apoyo vecinal, familiar y de amistad. La solidaridad vecinal que está surgiendo para ayudar a las personas mayores o con necesidades varias, tenemos un contacto más asiduo a través de los teléfonos con nuestras familias y amistades, colaboramos en nuestro deber cívico de no salir de casa...

Pues en este contexto es muy importante también prestar atención, si detectamos una señal que nos revela que algo no va bien a nuestro alrededor y SÍ, nos referimos a las mujeres víctimas de malos tratos por violencia de género.

Ruidos, sonidos extraños, gritos, chillidos, golpes o señales que puedan revelarnos que algo no va bien en nuestra familia, en nuestra vecindad, en nuestro círculo de amistades, que en estos días podemos sentir de manera diferente al resto del año. Tienen que saber más que nunca que pueden contar con nuestro apoyo.

En estas situaciones cualquiera de nosotras y nosotros podemos llamar al 016 en nombre de quienes no pueden. Ayudar a que en tu vecindad no haya violencia de género también salvas vidas.

Las ayudas en tiempos de crisis son más necesarias para las personas más vulnerables. De la misma forma que ayudamos en sus necesidades diarias a aquellas personas que lo necesitan, no nos olvidemos que ellas, las mujeres que sufren la violencia machista, también lo necesitan y aquí nuestra ayuda no depende de nadie, sino solo de nosotras mismas.

No dejemos más solas en tan difíciles momentos a las mujeres víctimas de violencia de género, ellas también necesitan toda nuestra ayuda, sigamos salvando vidas en casa. ¡No seas cómplice!